viernes, 14 de diciembre de 2012

Tonight

Esto lo hice para complacer a una personita especial, amante del Matsumiya<3
A ella le fascinó, así que espero que a ustedes también les guste ^^

Género: Lime
Pareja: Matsumiya
Extensión: Más largo que un drabble y más corto que un shot (?) xd




Sábado en la noche… Mientras todos los mortales estaban en alguna fiesta, yo me encontraba en casa, estrenando aquel juego que me compré en la tarde. Normalmente no era de ir a bares, y me pasaba todos los días metido en casa, haciendo lo de siempre, comiendo lo de siempre, y siendo el de siempre.

- Esto es tan fácil!- exclamé en voz alta antes de lanzar una risotada. El juego era realmente divertido, pero hubiese sido mucho mejor si estuviera con alguien. Miré mi móvil mientras descansaba sobre la mesa, pensando en llamarle, pero me contuve; seguramente tenía cosas más importantes que hacer- No te atrevas a molestarle, Kazunari- me regañé entre dientes mientras pausaba la partida para tomar un poco de refresco.

El sonido del timbre me hizo dar un respingo… ¿Quién podría ser a esta hora? A lo mejor era Sho o Aiba, ellos siempre terminaban pasando por mi casa cuando no tenían nada que hacer un sábado por la noche. Puse los ojos en blanco y con una leve sonrisa, me puse de pie; al abrir la puerta, continuaba sonriendo, pero me quedé congelado al ver quien estaba frente a mí…

Era Jun. Llevaba una botella de licor en una mano, mientras con la otra se apoyaba del quicio de la puerta; tenía la cabellera color castaño oscuro algo despeinada, la ligera sombra de barba contrastaba contra su pálida y delicada piel. Un destello de malicia brillaba en sus ojos y una sonrisa socarrona adornaba su rostro.

- J… ¿Qué estás haciendo aquí?- pregunté totalmente sorprendido, él ensanchó la sonrisa 
- Vine a verte, quería compartir… -levantó la botella- esto contigo, pues supuse que estabas algo aburrido aquí- se encogió de hombros.
- En verdad, si- me hice a un lado para dejarle pasar- él entró a mi apartamento, cerrando la puerta tras sus espaldas. Ambos nos dirigimos al estar y Jun tomó asiento en el sillón- Buscaré vasos, ¿vale?
- No, no, nos lo tomaremos de la botella… Yo no estoy enfermo, ni tu tampoco- comentó con una risilla- ¡Anda, ven, siéntate aquí, muchachote!- volvió a reír

Jun no solía ser tan risueño a menos que estuviese ebrio, y por lo que veía, esta vez sí lo estaba. Con un suspiro de resignación, me senté a su lado, observándole mientras él abría la botella y la llevaba a sus labios, dándose un largo trago. Al paso que íbamos, estaríamos ebrios muy, pero muy pronto.

Horas después y terminado el licor, más una botella de sake que tenía guardada, J y yo nos encontrábamos en el sofá, riendo como locos por cualquier tontería. Me incliné hacia la mesilla, tomando la botella de sake, en un tonto intento de tomar más, mas no encontré nada.
- ¡Maldición! ¡Ya se acabó!- musité haciendo un puchero. Jun me observó divertido y comenzó a reír, imitándole yo también
- Iría a comprar más pero… ya es muy tarde- levantó la mano izquierda, en un ademán para ver la hora, pero él no llevaba reloj
- ¡Baka! Ni reloj tienes!- reí con más fuerza, respaldándome en el sofá. J se quedó mirándome fijamente, sin decir palabra alguna
- Te ves muy lindo cuando ríes-

Sentía como mis mejillas se teñían de rojo ante aquél cumplido. Pero no debía de prestarle atención, Jun estaba borracho, más que yo, pero lo estaba. Siempre, siempre, él encontraba una ocasión para flirtear conmigo, y no podía negar que ese juego me gustaba, pero el dejarme llevar ese día sería algo imperdonable para ambos.

- Claro que no, y ahora, anda, vamos a dormir- musité poniéndome de pie. Eran pasadas las dos de la madrugada y no iba a dejar que Jun manejase en ese estado. El aludido me miró confuso antes de ponerse de pie
- Lo que usted diga, Majestad- Jun se tambaleó un poco, dejando escapar una risilla tonta. Me acerqué a él, para impedirle que se cayera; eso sólo hizo que él me dedicara una sonrisa algo burlona- Gracias, Ninomi…
- Bien, bien, ahora vas a burlarte de mí- le miré con el entrecejo fruncido- No es gracioso, J
- No pelees tanto, te vas a arrugar- puso uno de sus dedos en mis labios, sin dejar de sonreír. Sentía el corazón latirme apresuradamente, estaba algo nervioso por la cercanía entre ambos… Jun era muy atractivo y el tenerle así, tan cerca de mí, era demasiado tentador, pero si me alejaba bruscamente de él, podría caerse y eso era exactamente lo que quería evitar.
- Jun, estás ebrio, lo mejor es que vayas a dormir- musité en cuanto retiró los largos y torneados dedos de mis labios.
- ¿Contigo?-
- No, tu en la habitación de invitados, y yo en la mía- contesté entre dientes
- Ah, aburrido- hizo un puchero, haciéndome reír inevitablemente
- Vamos, ¡a la cama!- exclamé poniéndome a su lado y rodeando su cintura con uno de mis brazos. Él caminaba a mi lado, aferrado a mis hombros
- ¿Sabes? Eres mi mejor amigo en Arashi… Desde que te conocí siempre me has caído bien, enano cascarrabias- y ahí venía con lo que decía cada vez que estaba borracho- A pesar de que pasabas de mí al principio, yo siempre quise ser tu amigo y no sabes lo feliz que me hace el poder compartir estas cosas contigo…

Me detuve al oír aquellas palabras.

La sinceridad con la que mi compañero las dijo, fue tal, que sentí un estremecimiento. Al mirarle a los ojos, él sólo se limitó a asentir.
- ¿Lo dices en serio?-
- Por supuesto, jamás te mentiría, Nino- me miró a los ojos fijamente, como si me dejase ver en ellos cuan verídico era lo que decía.

Lentamente, fue acortando la distancia entre nuestros rostros; sabia que aquello era un error, que no debíamos hacer eso, pues éramos amigos y los amigos no hacían lo que el y yo estábamos a punto de hacer. 
- J… esto es incorrecto…- murmuré con voz queda
- No lo es, y lo sabes- susurró mientras rozaba sus cálidos labios contra los míos, llevó la mano libre hasta una de mis mejillas.
- Somos amigos-
- Nino, llevo demasiado tiempo deseando hacer esto, por favor, no me lo niegues…- mordió mi labio inferior con suavidad; su aliento chocaba contra mi boca, incitándome, enloqueciéndome, deseándole…

Cerré los ojos y llevé la otra mano hasta su estrecha cintura; quizás mañana me arrepentiría y quisiera matarme, pero me dejaría llevar por lo que sentía en aquél momento.
Asentí con lentitud, sintiendo la abrasadora sensación de sus labios contra los míos; Jun me besaba con necesidad, con una insaciable urgencia, como si estuviese sediento de mí. Correspondí a su beso, atrayéndolo por completo hacia mí, olvidándolo todo, solamente disfrutando de él.

Jun me llevó hasta la pared, dejándome aprisionado entre ella y su sólido cuerpo, mientras nuestras bocas continuaban devorándose mutuamente; una de sus manos descendió hasta mi cintura, acariciándome con lentitud mientras yo llevaba los brazos hasta su cuello, rodeándole con ellos. Un suave jadeo se escapó de mis labios, y en ese momento la lengua de Jun se abrió paso entre ellos, adentrándose en mi boca, explorándola, recorriendo cada milímetro de ella y dejándola rozar delicadamente contra la mía.

Sus fuertes manos me tomaban por la cintura, apegándome por completo contra él… Volví a jadear en cuanto sentí su erección rozar contra mi entrepierna; mordí su labio inferior con brusquedad al separarme de él. Me resultaba increíble que tan sólo por un beso me pusiera así, sabía que deseaba a Jun, pero jamás imaginé la intensidad de lo que sentía.

- Debemos dormir…- susurré con la respiración levemente agitada
- Pero, Nino- protestó- ¿No quieres?- volvió a rozar su miembro erecto contra mi cuerpo, haciéndome gemir por lo bajo
- Si quiero, claro que quiero… Pero hoy no, estás ebrio y quiero que estés totalmente consiente de lo que vamos a hacer.- sentencié con una sonrisa
- Vale- contestó como niño regañado. Sonreí al verle y deposité un suave beso en sus perfectos labios
- Te permitiré dormir conmigo al menos, ¿si?-
- De acuerdo- esbozó una sonrisa antes de tomar una de mis manos, dirigiéndonos a mi habitación
- ¿Qué no estabas tan borracho que no podías caminar?- inquirí al verle tan “lúcido” de repente.
- ¿Olvidaste que soy un buen actor?- le miré con los ojos entrecerrados, riendo sin poder evitarlo
- Eres un imbécil… mañana no haremos nada por mentiroso- ambos nos miramos y volvimos a sonreír, sabiendo que mañana eso si ocurriría y que nuestra relación seguiría siendo tan especial como siempre.

¿O quizá un poco más?

2 comentarios:

  1. SHIAWASE!!
    Que manera de conseguir lo que
    quiere J >/////<
    marcadas en mi mente y convulsione con estas palabras:
    "Nino, llevo demasiado tiempo deseando hacer esto, por favor, no me lo niegues."
    "Jun me besaba con necesidad, con una insaciable urgencia, como si estuviese sediento de mí." OMFG!! ... im dead
    LO AME!!

    Gracias Iza!! eres un sol *3*

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  2. Kyaaaaaaaaaaaa!!!! *grita histérica*
    Mi corazón Matsumiyesco ss feliz al leer tus drabbles!! *-*
    Está de más decir que me ha encantado! Jajaja debieron hacerlo ahí mismo x.x wAA *pervertida mode on* *----*

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